Los primeros pasos de tu pequeño son uno de los hitos más preciados, pero también más tempranos, de su vida. Este momento marca una nueva etapa y presagia muchos acontecimientos hermosos, pero también emocionantes, que están por venir. Para algunos padres, esta toma de conciencia puede ir acompañada de muchas emociones y preocupaciones. El salón familiar, el rincón de juego habitual de su bebé, puede quedarse de repente corto a la hora de mantener la atención o garantizar la seguridad.
Con las habilidades recién aprendidas, tu ser querido puede empezar a explorar horizontes y, antes de que te des cuenta, tu pequeño ya no estará donde lo viste por última vez. Por supuesto, los bebés y los niños pequeños no llegarán muy lejos, pero eso no quita el estrés que seguramente experimentará en determinados momentos. En este blog, te daremos algunas herramientas para esta fase tan especial.
Regala cumplidosAprender a andar conlleva altibajos, en sentido literal y figurado. A ti, como padre, te costará acostumbrarte, pero, por supuesto, lo mismo le ocurrirá a tu bebé. Por eso, mantén la calma delante de él y anímalo lo suficiente. Esto le dará cada vez más valor y las cosas mejorarán. Genial para ti y genial para ellos.
Crear un entorno seguroAhora que tu pequeño se va moviendo poco a poco por la habitación por sí solo, es de suma importancia disponer de un espacio (habitable) adecuado para los niños. Esto se debe a que los bebés pequeños pueden empezar a subirse solos a los muebles y tienen un mayor riesgo de caerse. Esto último es natural, por supuesto, pero no significa que sea agradable. Lo mejor para todas las partes es limitarlo al máximo. Y cuando tu pequeño se caiga, asegúrate de que no lo haga con demasiada fuerza. Piensa en una alfombra, una manta o una superficie blanda. Evita los suelos duros y resbaladizos, ya que aumentan el riesgo de caída porque tu hijo tiene menos agarre. Y asegúrate de poner los objetos peligrosos fuera del alcance del pequeño.
Restringe la zonaCuando quieras evitar que tu bebé vaya a cualquier sitio, pero aún es demasiado pequeño para un parque cerrado, resulta útil cerrar zonas o instalar una puerta para bebés.
Utiliza juguetesColocando o sujetando algunos juguetes aquí y allá, animas a tu bebé a caminar hacia ellos. También puedes optar por conseguir un andador o un coche para que tu bebé pueda caminar de forma independiente con sus juguetes.
Quédate cercaPuede resultar tentador dar un paseo rápido por otro sitio, pero cuando tu hijo está aprendiendo a andar, es esencial que te quedes con él. Un accidente es un pequeño rincón, sobre todo cuando aún no sabe exactamente cómo funcionan sus propias piernas y pies.
Compra un parque infantilTodavía no es el momento, pero cuando tu pequeño pase de los 24 meses, podrá andar mucho más lejos que durante los primeros meses de aprendizaje de la marcha. Sobre todo entonces, puede ser una sorpresa dónde se han metido. Si todavía te da un poco de reparo, puedes comprar un corralito. En un corralito o parque infantil, los niños a partir de 2 años pueden jugar tranquilamente, incluso con un amigo presente. Este corralito puede llevarse fácilmente a cualquier parte, lo que abre un mundo de posibilidades. Ya sea para ir a la playa, de acampada o de viaje de fin de semana con los amigos o la familia, el parque móvil puede llevarse a cualquier parte. De este modo, ya no estará limitado a su propio espacio vital con el pequeño.
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Esperamos haberte podido ayudar un poco con este blog. Recuerda que esto es sólo una fase de aprendizaje, y que tu pequeño lo dominará por sí solo. Se caerá a menudo, pero también se levantará por voluntad propia. Al fin y al cabo, los niños pequeños son curiosos por naturaleza, y se les abrirán muchas puertas con esta nueva habilidad.
Así que no te preocupes demasiado y disfruta de tu amorcito.
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